La mayoría de veces se opta por transpaletas manuales para el movimiento o apilado de mercancías en aplicaciones que no requieren de un uso intensivo, o en las que el espacio es reducido. En estos casos, Las transpaletas manuales pueden ser una buena opción, ya que son compactas, fiables y robustas.
No obstante, si el objetivo de la empresa es garantizar máxima productividad y rapidez en el movimiento de mercancías, mayor seguridad y ergonomía de los operarios y, además, reducir de forma drástica su esfuerzo físico, un modelo motorizado para aplicaciones ligeras puede ser la solución. En el artículo repasaremos algunas de las características más destacables de las transpaletas y de los apiladores eléctricos para aplicaciones ligeras.
Una de las principales mejoras de este tipo de carretillas elevadoras respecto a las transpaletas manuales es que, por el hecho de incorporar motor, las transpaletas y apiladores eléctricos para aplicaciones de baja intensidad garantizan movimientos de mercancía sin esfuerzo y, sin renunciar a la posibilidad de operar en espacios confinados. Todo, gracias a un diseño del chasis reducido. Su diseño compacto garantiza la máxima facilidad al maniobrar con cargas ligeras en espacios pequeños como supermercados, tiendas y almacenes, así como en la carga y descarga de camiones.
En definitiva, suponen una mejora a nivel de ergonomía en la manipulación de mercancías. Además, nuestros modelos eléctricos incorporan sistemas que garantizan la seguridad de los usuarios, como por ejemplo:
Gracias al diseño del brazo timón ergonómico de estos modelos, los operarios podrán controlar los equipos digitalmente de manera muy intuitiva. Además, el ángulo de giro del timón es de 180º lo que permite maniobras fluidas, garantizando un manejo seguro de la carga en todo momento. El control de las transpaletas y apiladores para aplicaciones ligeras es cómodo, fácil y sin esfuerzo, si lo comparamos con una transpaleta o apilador manual, lo que facilita aún más el trabajo de los operarios.
En cuanto a la utilización de los equipos, estos modelos eléctricos integran también un acceso por código PIN para restringir su uso a los operarios autorizados y maximizar así la seguridad del almacén.
A diferencia de una transpaleta eléctrica, una transpaleta manual no se tiene que recargar. Se trata de una diferencia no tan relevante, ya que la carga de los modelos eléctricos se pueda realizar de manera cómoda y rápida. Los modelos eléctricos BT Tyro incorporan baterías de litio, de gran eficiencia energética y carga rápida, que no requieren mantenimiento. La carga de este tipo de baterías es simple y fácil, basta con conectar la transpaleta a una toma de corriente, o extraer la batería y conectarla a cualquier toma de corriente. Esto ofrece la ventaja de poder realizar cargas de oportunidad durante las pausas, para asegurar una alta disponibilidad y flexibilidad.
¿Aún tiene dudas de si elegir un modelo manual o eléctrico para aplicaciones de baja intensidad? Déjenos ayudarle a tomar la decisión correcta. En Toyota Material Handling ofrecemos una amplia gama de productos y, además, le asesoraremos durante todo el proceso para encontrar la solución que mejor se adapta a sus necesidades.