Un brazo robótico industrial es uno de los tipos de robots más utilizados en la actualidad en multitud de sectores, como la automoción y, por supuesto, la logística.
La característica principal de esta tecnología es que se trata de dispositivos programables, cuyas funciones principales y funcionamiento son semejantes a las de un brazo humano.
Los diferentes componentes que conforman un brazo robótico se unen y conectan entre sí, con el fin de que efectúe movimientos de rotación y de translación. Al final del brazo, se ubica la mano robótica, la cual puede tener forma de pinza, de ventosa o de garra, según la función a ejecutar.
Dentro de la gran variedad de funciones de un brazo robótico encontramos muchas relacionadas con los trabajos de almacén, como el movimiento de mercancías, la preparación de pedidos (picking) o el ensamblaje de piezas.
Por lo general, los brazos robóticos industriales funcionan mediante la ejecución de un software con el que programar las principales funciones y de unos sensores que miden diferentes factores como: ubicación, fuerza, aceleración, temperatura, etc. De esta forma, es posible llevar a cabo una gran variedad de acciones de automatización con gran seguridad y precisión.
Las principales partes o componentes que conforman un brazo robótico son las siguientes:
Un brazo robótico industrial se utiliza, principalmente, sustituir o simular las acciones y competencias del brazo humano, durante diferentes tareas y operativas de producción o logística.
Al estar totalmente automatizado, este tipo de dispositivos pueden llegar a ejecutar las funciones y tareas de un operario, con mayor precisión y seguridad. Además, estos robots tienen la capacidad de poder manejar todo tipo de cargas, tanto livianas como pesadas.
Estos dispositivos tienen una gran versatilidad, pudiendo operar solos o formar parte de una línea de montaje. Su precisión y rapidez, los convierten en especialmente útiles para industrias como la automoción, que requiere un trabajo preciso, intenso y rápido, así como también en el trabajo de almacén intensivo.
La logística del e-commerce una de las áreas donde el uso de este tipo de brazos robóticos es cada vez más habitual (y podríamos decir que casi imprescindible).
Mejora de la eficiencia en producción y logística,
Permite llevar a cabo de forma automática, es decir, sin intervención humana directa, la carga de objetos pesados y operativas que requieren de una elevada precisión.
Mejora de la seguridad y la ergonomía de los empleados. Los robots sustituyen a los humanos a la hora de realizar tareas pesadas en entornos peligrosos, lo que evita el riesgo de accidentes y lesiones.
Máxima productividad. Los brazos robóticos industriales pueden operar sin cansarse las 24 horas del día, durante los siete días de la semana. Esto permite a las empresas mantener la producción al mismo tiempo que se reducen los costos laborales.
Cero errores. Los brazos robóticos industriales se caracterizan por poder trabajar con máxima precisión de manera constante. Esto permite llegar al objetivo de cero errores, tanto en trabajos de producción como logísticos.
En conclusión, los brazos robóticos industriales ayudan a las empresas a aumentar su ventaja competitiva y mantener los costos bajos. Todo ello es posible gracias a la activación de la automatización de los procesos clave, los cuales contribuyen a una mayor seguridad para los trabajadores y una notable mejora de los niveles de producción, rentabilidad y productividad.
Veamos, a continuación, las principales aplicaciones del brazo robótico industrial:
Al seleccionar un brazo robótico industrial, es importante considerar varios factores:
Es crucial identificar las tareas a automatizar para elegir el brazo robótico adecuado. Para ensamblaje con alta precisión y velocidad, un SCARA es ideal. Para movimientos lineales, como pick and place, un cartesiano es mejor. Para manipular objetos pesados o en entornos peligrosos, un brazo articulado ofrece versatilidad y fuerza.
Toyota Material Handling le ayuda a analizar e implementar las soluciones de automatización que realmente necesita su empresa, en función del volumen de trabajo, productos a manejar, posibilidades de inversión, visión de futuro, etc.
En general, la producción o la manipulación de materiales automatizada ofrece una mayor productividad y rentabilidad y un funcionamiento más eficiente en su conjunto.
En Toyota disponemos de diversas soluciones para la automatización de sus procesos logísticos. Optimizamos procesos sencillos con nuestros Autopilot (vehículos de guiado automático (AGV)) que se gestionan fácilmente gracias al innovador software de automatización inteligente T-ONE. A la vez que, desarrollamos los más complejos proyectos de integración logística.
En un contexto de alto nivel de automatización, los robots industriales pueden ser el complemento idóneo para conseguir liberar a los operarios de los trabajos más pesados. De esta forma, pueden dedicar su tiempo a tareas de supervisión y control, con más valor añadidos y más rentables para la empresa.