Cuando haya decidido apostar por la automatización de algunos procesos intralogísticos en manipulación de materiales, debe mantener siempre presente el factor humano como un elemento prioritario en su proyecto de automatización. Un proyecto de automatización exitoso comienza pensando en sus empleados: ¿qué tan preparada está la empresa en lo que respecta a la automatización? ¿Están los empleados acostumbrados a trabajar con AGV? ¿Saben cómo interactuar con ellos?
Si los operarios y la estructura corporativa mantienen los mismos hábitos después de la implementación de los procesos de automatización, es probable que el las carretillas automáticas en ocasiones, pueda interrumpir su rumbo regularmente, lo que acaba repercutiendo en un descenso de la productividad en los procesos. Para evitar este tipo de problemáticas, se debe tener en cuenta el factor primordial: la formación. Los empleados deben saber cómo trabajar junto con los AGV.
El primer paso es crear en los empleados una comprensión de los beneficios de trabajar conjuntamente con AGV. Este elemento es indispensable, ya que los vehículos automatizados están asumiendo actividades que antes realizadas por los operarios. Por tanto es normal, que a priori, el personal los pueda ver como una amenaza para su propio trabajo. Para tratar de minimizar este impacto, recomendamos empezar a automatizar tareas monótonas y de bajo valor añadido, que el personal estará encantado de traspasar, e invertir en la reorganización de tareas. Otros consejos, pueden ser tratar de humanizar los AGV: intente darles un nombre en lugar de decir máquina A o B. A la vez, establecer un KPI para sus equipos con el objetivo de minimizar la cantidad de paradas de los AGV, puede ser un reto a llevar a cabo para tratar de harmonizar la relación empleado vs. AGV
En la mayoría de las aplicaciones existe una mezcla de AGV y operarios, por eso la capacitación es muy importante, no solo para las personas que trabajan en esa área, sino también para el personal temporal, proveedores, etc. Porque las personas deben ser conscientes del hecho de que un vehículo automatizado se comporta de manera diferente a un operario.
Una pregunta que surge a menudo es si la automatización aporta beneficios en la seguridad o no. Un beneficio importante de los AGV es la permanencia en el estado de alerta. además, nunca sienten síntomas de fatiga como el factor humano. Los vehículos automatizados se comportarán de forma segura cuando se utilicen de la forma correcta. En primer lugar, gracias al sistema de navegación a bordo; y en segundo lugar, debido a la normativa europea que exigen que estén equipados con escáneres, sensores, señales de alerta, botones de emergencia y otros equipos de seguridad adicionales. Por último, también hay un mecanismo de control de autodiagnóstico: desde el momento en que uno de los indicadores no se sitúa entre los parámetros establecidos, la máquina se detendrá para evitar cualquier riesgo.
Por último, lo que puede ayudar a mejorar la seguridad de su planta automatizada es invertir en visualización mediante líneas que indiquen la ruta del AGV. Otra solución puede ser la de añadir equipos de seguridad o barreras de seguridad entre las rutas y las entradas para vehículos u otras zonas específicas. Los escáneres también pueden indicar de inmediato si hay personal en ésta área y además un semáforo puede indicarle si es seguro entrar en una determinada zona.