La automatización ya no es una solución exclusiva para grandes empresas con grandes presupuestos y con procesos extremadamente estandarizados. Las innovaciones tecnológicas de los últimos años han derivado en una nueva generación de soluciones con robots y AGV (del inglés Automatic Guided Vehicle) que funcionan de forma autónoma y permiten una revolución en la gestión del almacén. Esto proporciona grandes ventajas, como flexibilidad, escalabilidad y seguridad. Garantizando el retorno de inversión de este tipo de soluciones incluso en el corto plazo.
Automatización del almacén
La automatización del almacén es todo menos nuevo. Entre los años sesenta y setenta surgieron los primeros almacenes en los que los pallets se cargaban y descargaban de forma totalmente automática utilizando grúas y transportadores de rodillos. En ellos, el factor humano ya no estaba involucrado.
Los robots y los Vehículos Automáticos Guiados (AGV) tampoco son un desarrollo reciente. Los robots han soldado partes de vehículos en fábricas de automóviles desde hace décadas. Las imprentas han estado utilizando AGVs especialmente diseñados para imprimir grandes rollos de papel en la línea durante décadas.
Aunque la automatización no era una solución para todos en ese momento debido a que los costes de inversión eran muy altos, los tiempos de implementación muy largos y la flexibilidad de los sistemas era limitada. Estos sistemas eran especialmente eficientes a la hora de repetir las mismas acciones una y otra vez. Eso lo único que ha no cambiado en la actualidad. Pero ¿Cómo han evolucionado exactamente?
Estandarizar primero, automatizar después
Antes de responder esta pregunta, primero debemos distinguir entre las unidades a desplazar por el almacén. En muchos almacenes encontramos los mismos tipos de productos en tres formas diferentes:
- Artículos: Como un producto suelto o empaquetado por unidades de consumo (por ejemplo, una caja de clips).
- Cajas o paquetes: En una caja externa en la que se empaquetan varios artículos.
- Pallets: En un soporte de carga estándar (pallet) en el que se apilan varios paquetes.
La automatización de almacenes con pallets es relativamente fácil ya que existe un tamaño estándar de pallet que se utiliza mayoritariamente. Por este motivo, los almacenes automáticos de pallets existen hace tiempo. La automatización a nivel de paquete es más compleja, derivada de la variedad de los tamaños de las cajas según el tipo de mercancía y la industria. Finalmente, la automatización a nivel de artículo es aún más compleja, dada la gran variedad de formas y tamaños.
En realidad, el almacenamiento automatizado a nivel de cajas o artículos sólo es posible colocando primero los artículos en bandejas o en contenedores de plástico estándar. Nuestra recomendación: Estandarizar antes de automatizar.
Inteligencia artificial
En los últimos años, se ha desarrollado una nueva generación de soluciones de automatización. Los desarrollos tecnológicos ultrarrápidos aumentan la flexibilidad de este tipo de soluciones. Esto se debe en gran medida a los desarrollos en el campo de la tecnología de visión e inteligencia artificial. Los robots, los AGV y otros equipos obtienen gracias a estos nuevos desarrollos nuevas funcionalidades que les permiten realizar tareas de forma autónoma.
En los primeros sistemas automatizados, los robots y AGV aún no estaban dotados de estas funcionalidades. Cada acción que realizaban, se regía por un sistema de software global, que les indicaba los movimientos que debían realizar. Por ejemplo, el AGV sólo giraba a la izquierda cuando el software se lo indicaba o si un robot tenía que que recoger algo, era el software que indicaba exactamente cómo debía realizar las maniobras de agarre.
En cambio, hoy en día estos equipos pueden reconocer su entorno. Los AGV saben exactamente dónde se encuentran, pueden encontrar su propio camino e incluso evitar obstáculos. Los robots detectan qué elemento se encuentra frente a ellos y saben cómo recogerlo. Tanto los AGV como los robots detectan de inmediato cuando hay personas cerca. Al detectar una persona cerca, ajustan su velocidad o se detienen por completo hasta que el peligro ha pasado y pueden volver a trabajar de manera segura.
Por lo tanto, estos sistemas realizan las tareas de forma completamente independiente sin necesidad de que un software les indique lo que deben de hacer paso por paso.
Autónomo en lugar de automático
Hace un tiempo, las soluciones de automatización estaban limitadas a una única opción: implementar sistemas completamente automáticos. Sin embargo, los almacenes de hoy en día tienen otra opción: la implementación de robots y AGV que funcionan de forma autónoma. Esa segunda opción es una alternativa que representa un menor coste de inversión y menores tiempos de implementación.
La nueva generación de robots y AGV ofrece más ventajas en comparación con otras formas de automatización:
- Flexibilidad: Estos sistemas pueden aprender nuevas acciones sin necesidad de reprogramación y sin tener que ajustar el entorno en el que se encuentran.
- Seguridad: No requieren de una valla que los separe de las personas, pueden operar entre personas en zonas del almacén ya existentes.
- Escalabilidad: No es necesario automatizar de inmediato todo el almacén. Es posible comenzar con un único robot o AGV e ir ampliando el sistema según sea necesario.
- Tiempo de recuperación de la inversión: Gracias a la flexibilidad y escalabilidad de estos sistemas, los costes de inversión son relativamente bajos y el tiempo de recuperación de la inversión es corto. No son necesarias grandes modificaciones en el almacén.
En resumen: Los rápidos desarrollos tecnológicos de los últimos años hacen posibles nuevas formas de automatización. Unos sistemas de automatización sin los principales riesgos asociados y con los sistemas de automatización tradicionales, que aclaran cualquier tipo de malentendido relacionado con el proceso de automatización. Eso convierte la automatización en una posibilidad interesante para todo tipo de empresas.