La automatización de carretillas elevadoras ofrece una amplia variedad de beneficios. El uso de carretillas elevadoras automatizadas no solo mejora la seguridad, reduce los accidentes y minimiza los daños en la carga, sino que también optimiza el consumo de energía y aumenta la eficiencia diaria. Esta automatización está especialmente diseñada para reforzar la seguridad en el entorno laboral.
La semiautomatización de las carretillas elevadoras actúa como un enlace entre la automatización total y el trabajo manual, lo que la hace perfectamente equilibrada. Es gracias a esta tecnología, que se automatiza una parte del proceso de logística interna, permitiendo que las carretillas realicen tareas repetitivas de manera autónoma, como abastecer una línea de embalaje con palés vacíos o llevar palés terminados al centro de expedición.
La automatización de las carretillas elevadoras no solo representa ahorro de costes para las empresas, sino que también puede aumentar la productividad de manera significativa. La precisión en las tareas se ve mejorada al eliminar los errores humanos, ya que las carretillas elevadoras realizan el trabajo de manera consistente. Esto no solo contribuye a mejorar la seguridad laboral, sino que también evita posibles errores al seguir rutas predefinidas y estar equipadas con sensores que detectan obstáculos y personas, deteniéndose para prevenir accidentes y daños en la mercancía.
Asimismo, las carretillas automáticas basadas en diseños estándar pueden integrarse para trabajar de manera eficiente entre sí o con otros sistemas. Su flexibilidad permite adaptarse a las necesidades individuales de cada cliente, siendo adecuadas para instalaciones nuevas o existentes sin requerir inversiones costosas. Es crucial verificar que los suelos estén en óptimas condiciones y las estanterías se encuentren en perfecto estado durante la fase de evaluación.
La problemática con los sistemas extensos y rígidos de automatización completa se debe a su alto costo e inflexibilidad, lo que puede llevar a las empresas a comprometerse con una inversión a largo plazo. En este escenario, es fundamental que la empresa tenga un conocimiento preciso de la calidad, tamaño y volúmenes de los productos que almacenará a lo largo del tiempo. Además, la inversión inicial para un sistema de almacenamiento personalizado a gran escala es considerable, y el mantenimiento técnico requiere habilidades especializadas, lo que también implica costos adicionales.
Una alternativa a un almacén automatizado "rígido" o a un sistema de transporte podría ser la automatización de carretillas elevadoras de Toyota. Estas carretillas elevadoras con piloto automático se fabrican en un 95% en la misma línea de producción que las demás carretillas estándar de la marca. El 5% restante se compone de software y equipos de automatización. El mantenimiento de una carretilla automatizada es prácticamente igual al de una carretilla estándar, lo que resulta en una reducción de los costes de mantenimiento en comparación con una totalmente automatizada. Además, las rutas y operaciones de una carretilla automatizada pueden ser ajustadas fácilmente para adaptarse a posibles nuevos productos o cambios en el volumen de operaciones.
La implementación de este proyecto se destaca por su sencillez y facilidad en comparación con la automatización total. Se puede iniciar la inversión con una cantidad mínima de dinero y realizar algunas modificaciones. Por lo general, el entorno operativo de la automatización de carretillas elevadoras no requiere cambios significativos. Además, si es necesario, se pueden llevar a cabo operaciones manuales. Esto garantiza un funcionamiento seguro y flexible en contraste con la automatización total.
Según las necesidades de la empresa, es posible adquirir una carretilla automatizada para el traslado de mercancías por tan solo 25.000 euros cuando el cliente instala y programa la máquina.
Por lo general, las cargas de menos de 500 kg se manipulan con transpaletas manuales, pero automatizar este tipo de movimientos simples y repetitivos puede ser una opción viable, liberando recursos humanos para labores más productivas y variadas. El costo total de un trabajador de logística es de aproximadamente 43.000 euros al año. Si la empresa opera por turnos, el período de recuperación de la inversión en la carretilla elevadora es relativamente corto. Además del significativo ahorro de costos, los trabajadores pueden enfocarse en tareas de valor añadido mientras la automatización de las carretillas elevadoras se encarga de las operaciones repetitivas que afectan la eficiencia.
Dependiendo de la aplicación y la complejidad del proyecto, la transición a la automatización de carretillas elevadoras puede tomar entre 3 y 10 meses, lo que incluye el tiempo de entrega y la evaluación de las necesidades.