El mantenimiento de una flota de carretillas elevadoras impacta directamente sobre los costes operativos y la rentabilidad. Mantener la flota operativa y en funcionamiento es sinónimo de mantener un negocio productivo y rentable. Por ese motivo, en este artículo le ayudaremos a identificar el momento óptimo para reemplazar una carretilla elevadora. Trataremos cuáles son las señales de advertencia que puede observar en su equipo y que determinarán que necesita ser reemplazado así como los beneficios de una renovación planificada.
Deterioro por uso: desglose sus averías para conseguir rentabilidad
Fugas hidráulicas, tuberías obstruidas, cadenas desgastadas, un mástil que no se eleva, problemas con la batería, la suspensión desequilibrada, dificultades de dirección... ¿Se ha convertido el mantenimiento de la carretilla en una necesidad continua de solución de problemas? ¿Supone esta situación un aumento de costes solo para poder mantener su equipo en funcionamiento?
Si el uso intensivo prolongado de su flota de carretillas está causando problemas de mantenimiento de manera sostenida en el tiempo, puede ser el momento de considerar reemplazar el equipo que está causando un bajo rendimiento. Cuando una empresa se ve obligada a afrontar costes de mantenimiento continuo, el efecto en el resultado final va mucho más allá del coste de reemplazar las bujías desgastadas o encontrar la fuente del problema eléctrico en un motor de transmisión obsoleto.
Accidentes y daños: los peores escenarios
Accidentes
Una dirección floja o una suspensión desequilibrada pueden provocar vuelcos, impactos y otros accidentes con una carretilla elevadora. Además de lesionar a los operarios, esto puede causar daños permanentes en el equipo creando problemas de mantenimiento continuo y tiempo de inactividad que afectan directamente a la productividad y rentabilidad de las operaciones de su empresa.
Daños
Los daños personales a empleados son el peor de los escenarios. Las lesiones en operarios derivadas de un accidente con una carretilla elevadora es el peor de los casos. Junto con el impacto emocional, una empresa podría verse también afectada por sus responsabilidades legales.
Daño al almacén
Además de los elevados costes derivados del mantenimiento, los daños personales y la pérdida de productividad, un accidente con un equipo de manutención puede también resultar en costes de reparación de estanterías, puertas de muelles de carga y en general diversas operaciones de reparación de las instalaciones de su empresa. Además, los daños a mercancías pueden afectar a los plazos de entrega pudiendo incluso poner en riesgo el negocio en el caso de que este tipo de daños persistan en el tiempo.
Perder dinero: el verdadero coste de los equipos dañados
El tiempo de inactividad de cualquier equipo de una flota de carretillas elevadoras, supone un coste mucho mayor que al puro coste de los recambios y a la mano de obra en la reparación. Es importante considerar también la pérdida de productividad, así como los costes del tiempo de inactividad para los operarios cuando su equipo está inmovilizado por una avería.
Cuando se considera la pérdida de beneficios derivados de retrasos en el movimiento de mercancías, el impacto financiero total de una carretilla elevadora obsoleta puede extenderse fácilmente hasta miles de euros por hora. En estos casos, disponer de carretillas de repuesto no es una solución óptima ya que si estas situaciones son frecuentes pueden ocasionar un aumento general de los costes operativos. A la vez, tampoco lo son los reemplazos rápidos ni los alquileres puntuales. Si bien pueden solucionar problemas puntuales a un bajo coste, pueden crear un ciclo interminable de mantenimiento no planificado que agrava el impacto negativo sobre el negocio.
Vida económica y vida útil: las dos vidas de una carretilla elevadora
Hay dos formas diferentes de realizar un seguimiento de la vida útil de su carretilla elevadora: teniendo en cuenta la vida útil o teniendo en cuenta la vida económica de la misma. Pero, ¿qué entendemos por cada uno de estos conceptos?
- Vida útil: Se trata del tiempo máximo que su carretilla elevadora se puede utilizar de forma productiva. La vida útil de una carretilla elevadora termina cuando no se pueden realizar reparaciones para mantenerla en funcionamiento.
- Vida económica: Se trata del periodo de tiempo en el que financieramente hablando, tiene sentido mantener una carretilla elevadora en lugar de reemplazarla. La vida económica de un equipo termina cuando las reparaciones son más caras que el coste de reemplazarlo por uno nuevo.
Abordar la gestión de la flota desde el punto de vista de maximizar la vida económica de las carretillas elevadoras maximizará el retorno de la inversión y minimizará sus costes operativos, evitando los costes de mantenimiento excesivos que conllevan aumentar la vida útil de una carretilla elevadora.
Acceso a mejoras disponibles
El momento de la renovación de una carretilla elevadora supone una oportunidad para volver a salir al mercado e incorporar nuevas tecnologías al equipo que permitan dar un impulso en productividad a las operaciones intralogísticas. Repasamos a continuación algunos ejemplos:
Sistemas de estabilidad
Las carretillas contrapesadas Toyota vienen equipadas con SAS, un sistema de estabilidad activa que ayuda a reducir los casos de vuelcos hacia adelante, hacia atrás y laterales. Está patentado y desarrollado para cumplir con los últimos estándares de seguridad desde hace 20 años.
Diseño ergonómico
Operar una carretilla elevadora puede ser un trabajo duro, especialmente cuando los operarios tienen que estar en posiciones incómodas en equipos obsoletos. Los asientos y respaldos ergonómicos se adaptan al operario en las tareas físicamente más demandantes. Las mejoras en ergonomía se pueden encontrar como estándar en gran parte de los nuevos modelos de Toyota. Esta ergonomía en la manutención de materiales se traduce en mejoras en seguridad lo que a su vez que contribuye a mejorar la productividad.
Desarrollos técnicos
La legislación vigente de la Unión Europea y la reducción progresiva del coste de energía eléctrica han hecho que sea cada vez más atractivo pasar de carretillas de combustión interna a carretillas eléctricas. Las baterías de litio permiten cargas de oportunidad, lo que aumenta el tiempo de funcionamiento de los equipos.
Los desarrollos técnicos de los últimos años han contribuido a un mayor rendimiento de los motores eléctricos, haciéndolos tan potentes como los motores de combustión interna. Al cambiar de carretillas elevadoras alimentadas con combustibles fósiles a carretillas elevadoras eléctricas, no solo puede ahorrar en costes, sino que también puede hacer que las operaciones de su empresa sean más respetuosas con el medio ambiente.
Conectividad
Las carretillas Toyota tienen telemática integrada de serie en la mayoría de modelos, lo que las convierte en carretillas inteligentes. Los datos que transmiten las carretillas inteligentes le permitirán obtener una visión más profunda de las operaciones de su almacén. Conocer, por ejemplo, la tasa de utilización de sus carretillas, el número de golpes o el consumo de energía, le permite maximizar el potencial de su flota y controlar los costes generales.