Logística refrigerada: lo que debes saber para tu almacén frío

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Jaime Mira Galiana

Economista, Experto y Consultor en Logística Ex- Director Técnico de la Fundación Icil y profesor del Máster Director General y de Logística de empresas de Logística y operadores logísticos

Publicado el 12 septiembre 2023 - 4 minutos de lectura

La logística del frío está compuesta por diversos elementos, desde el almacén frío en sí mismo atemperado por desde refrigeradores hasta congeladores, incluyendo las cámaras frigoríficas o los propios camiones, hasta las actividades necesarias para que un producto en cuestión, ya sea alimenticio, sanitario o farmacéutico, se pueda mantener a la temperatura adecuada.

No basta con que haya un lugar frío en el que almacenar los productos, sino que toda la cadena logística del frío ha de adaptarse a las necesidades de conservación: el transporte, los almacenes, las zonas de venta… Y, por supuesto, también hace referencia al factor humano, el cual debe operar en estas condiciones complejas.

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Logística refrigerada: lo que debes saber para tu almacén frío

Dependiendo de cuánto tiempo deba estar el producto conservado en almacén frío, encontramos dos sistemas:

  • Congelación: las temperaturas son inferiores a 0º C (podrían llegar a -20º C o -30º C). Es un método de conservación en frío a largo plazo.
  • Refrigeración: un mecanismo a corto plazo, en el que se establecen temperaturas superiores a 0º C e inferiores a 10º C.

Uno de los principales retos en la gestión de la cadena de almacenamiento frío es conseguir que la temperatura esté en la horquilla exacta que exige cada producto en concreto. No porque se consiga más frío es mejor, sino que hay que mantenerlo en el correcto estado, tanto positivo como negativo. Como curiosidad, es interesante destacar que el producto más difícil de transportar es el chocolate, que tiene que estar a 16º C.

Por ello, se encuentran 5 grandes gamas de temperatura negativa para el mantenimiento de los productos:

  • De 0 a -4º C
  • De -4 a -8º C
  • De -8 a -12º C
  • -20º C, para los productos congelados
  • -30º C, para los productos helados

En el almacén frío se precisa un descenso de las temperaturas y, de este modo, evitar el crecimiento de agentes que puedan alterar el correcto estado del producto. Para ello, se diferencian dos sistemas:

  • Cadena de frío activa: genera frío y mantiene una temperatura constante
  • Cadena de frío pasiva: mantiene el frío, pero no lo crea

almacen frío con carretilla retráctil

 

 

 

 

El transporte en la cadena de frío

Desde hace un tiempo, han aumentado el número de productos que han de permanecer a una temperatura fija y controlada. Esto se debe, entre otras circunstancias, al aumento de las importaciones y las exportaciones, y a que cada vez se consumen más los productos frescos. Lógicamente, acaba repercutiendo en un incremento de la necesidad de contar con instalaciones logísticas que permitan el almacenamiento en frío.

Antes de llegar a profundizar sobre el almacén frío, hay que considerar un proceso de suma importancia: el transporte. ¿Y cómo se realiza este?

  • Avión: es el sistema más rápido y eficaz. Los aeropuertos cuentan con centro de control de temperatura de productos perecederos.
  • Barco: a través de buques frigoríficos o con contenedores refrigerados se consigue el transporte (a la temperatura precisa) por vía acuática.
  • Camión (transporte por carretera): el modelo actual es hacer el transporte con contenedores frigoríficos o refrigerados en el camión.
  • Ferrocarril: al igual que en los barcos o en los camiones, lo más habitual, en estos momentos, es el uso de contenedores frigoríficos. Las plataformas de ferrocarril tienen equipos autógenos que dan electricidad a dichos contenedores.

La clasificación anterior demuestra que existe un sistema de traslado transversal a todos, que es la intermodalidad, es decir, los contenedores refrigerados pueden ser transportados en varios medios de transporte.

apilador entrando en almacén frío

Gestión eficaz en entornos refrigerados

En varias ocasiones hemos querido destacar en este blog la importancia que tiene, para el devenir de una empresa, la correcta gestión de la logística y la importancia de los procesos. Por ejemplo, un mal servicio, provocado por un retraso en la entrega o un error en el envío, puede ocasionar errores en la cadena de trabajo de diferentes departamentos.

En el caso de la logística de frío, las consecuencias negativas del error se multiplican. No es lo mismo entregar un teléfono móvil estropeado, que se sustituirá en la mayor brevedad posible, a entregar alimentos en mal estado, que es posible que provoquen errores con mayores consecuencias. Una excelente muestra la encontramos actualmente con las vacunas contra la COVID-19, que para su conservación están sujetas al mantenimiento a unas temperaturas concretas.

Evidentemente, la eficiencia energética en el almacén y el punto de venta, así como un control continuo de la temperatura, son pilares fundamentales durante todo el proceso. Por ello, es de extrema importancia, si nuestra empresa ha de transportar, almacenar y repartir productos con unas exigencias térmicas explícitas, que se haga una considerable inversión en la logística del frío. Y esa inversión, en gran medida, influirá en la adquisición de soluciones adaptadas y eficientes en todas las fases de la cadena. Estas se van actualizando y modernizando, buena muestra de ello son los monitores, los controladores de frío o las etiquetas inteligentes, que cambian de color cuando la temperatura no es la adecuada.

Soluciones adaptadas para el almacén frío

Antes de entrar en detalle, un aspecto que refleja la importancia de hacer una gestión eficaz en el mantenimiento de la cadena de frío se basa en tener en cuenta que la distribución de un producto refrigerado supone el doble de gasto que la de un producto seco. Y si está congelado, el gasto es cuatro veces mayor.

Condiciones de trabajo de los operarios

En España, la legislación dicta que, con los equipos adecuados, se puede estar trabajando dentro de un almacén frío como una cámara frigorífica un máximo de 45 minutos; posteriormente, hay que hacer 15 minutos de descanso fuera de la cámara, quitarse la ropa y ponerla en secadores para eliminar el frío, la humedad y el agua que haya podido coger. Para el personal que ha de emplearse en estas condiciones tan adversas (en ocasiones hasta los -30º C) existen cabinas calefactadas. Por añadidura, han de recibir la formación y el equipamiento preciso.

 

operario accediendo con retráctil a almacén frío

Carretillas adaptadas y baterías de litio

Es vital una correcta elección del tipo de carretillas elevadoras Toyota. La temperatura a la que va a ser sometido este equipo afecta a la capacidad de la batería, la electrónica, la lubricación… Disponemos de una amplia gama de carretillas que pueden ser utilizadas a 0º C sin ningún problema y que, para operar en entornos de hasta -30º C, sólo necesitan una pequeña adaptación. Entre las características específicas de estas carretillas adaptadas a trabajos en almacén la cadena de frío están el acero inoxidable, aceite para cámaras frigoríficas, plataformas antideslizantes o baterías calentadas.

Un elemento crucial es el tipo de batería. Tanto las baterías de plomo con las de litio tienen capacidad para funcionar en cámaras frigoríficas, sin embargo, las primeras suelen perder gran parte de energía. Por ello, lo ideal es utilizar carretillas con baterías de litio y beneficiarse de las ventajas que ofrecen, como la capacidad de funcionamiento de un tiempo más prolongado. Asimismo, las baterías de litio con calentador son aptas para ser cargadas dentro de la zona de la cámara frigorífica, algo que se puede hacer en los momentos de descanso de los operarios. Por si fuera poco, el mantener las carretillas en ambientes fríos, prevendrá de los problemas de condensación tan habituales cuando se entra y sale de un almacén frigorífico.

Almacenamiento de alta densidad en la logística de frío

Hemos hablado de las condiciones de los operarios, también de los mejores sistemas para transportar materiales dentro de un entorno de frío y, obviamente, hay que mencionar el almacenaje en frío. Este tipo de almacenamiento es costoso y, por ende, hay que tratar de minimizar el gasto que supone, pero sin perder efectividad ni eficacia. Optar por carretillas de pasillo muy estrecho, por sistemas de almacenaje compactos e instalaciones en estanterías que priorizan la altura, son tres medidas esenciales para un buen almacén en frío.El almacenamiento en pasillos muy estrechos aumenta el uso del espacio en aproximadamente un 30 % en comparación con las estanterías tradicionales, lo que lo convierte en una buena opción para almacenes frigoríficos.

Por El almacenamiento en pasillos muy estrechos aumenta el uso del espacio en aproximadamente un 30 % en comparación con las estanterías tradicionales, lo que lo convierte en una buena opción para almacenes frigoríficos.ejemplo, las soluciones de lanzaderas de almacén semi-automatizadas proporcionan almacenamiento de alta densidad sin comprometer el rendimiento. El resultado final es la consecución de disponer de un pallet a bajo coste que es movido gracias a su operativa semiautomática. Las cargas son transportadas dentro de las estanterías en trasbordadores controlados por radio, que se mueven entre los raíles con carretillas convencionales.

 

radioshuttle automatizado en almacén frío

 

Automatización

Pero cada vez más, en los procesos logísticos del frío, es posible contemplar la automatización de los sistemas, de forma integral o bien, apostando por la automatización logística por etapas. No sólo hacemos referencia a los procesos que integran la logística del frío, sino de prácticamente toda la operativa intralogística. Un almacén frío es una de las áreas en las que más necesaria es la automatización. Por ello, invertir en un proceso de automatización siempre será una buena inversión. Finalmente, mediante el uso de carretillas automatizadas, el personal puede centrarse en trabajar en áreas refrigeradas. Además, las estanterías móviles son otro elemento que mejorará significativamente la operativa en las condiciones de frío. 

Robotización

Cada vez más, debemos ser conscientes de la importancia de los procesos de automatización, y en paralelo debemos prestar atención al desarrollo de la robotización, así como el paso a paso hacia un almacén automático. En el caso concreto de la logística del frío, este avance facilita que la mercancía, en las cámaras frigoríficas, sea manipulada por robots y, por ende, evita que un ser humano tenga que trabajar en estas condiciones. Es importante destacar que dentro de las cámaras frigoríficas las carretillas no hacen ruido, por eso, es obligatorio que lleven un girofaro que pueda alertar de su presencia a las personas que estén en su interior.

En este artículo le hemos ofrecido consejos para optimizar el proceso logístico en almacebes en frío, si tiene cualquier otra duda, contacte con nosotros.

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