Los Sistemas de Información Logística (SIL) son soluciones digitales, cada vez más perfeccionadas y complejas, que se implementan en los almacenes y en el conjunto del proceso logístico con el fin de mejorar la gestión de las distintas operativas: almacenaje, aprovisionamiento, transporte, preparación de pedidos, etc.
Las soluciones automatizadas pueden parecer únicas y complejas, pero el flujo de material en realidad se mueve de manera bastante lógica y sistemática por todo el almacén.
Estos programas de gestión logística permiten hacer realidad el concepto de almacén digital, donde la totalidad de tareas de preparación de pedidos y de control de inventario se realizan de forma informatizada y automatizada. Esto permite ganar en rapidez, liberar a los empleados de las tareas más repetitivas y penosas, eliminar el papel y, en general, optimizar y añadir calidad al trabajo.
Lo que hacen estos sistemas es extraer y procesar datos e información de las distintas actividades logísticas mediante un Software de Gestión de Almacenes (SGA), a través de Sistemas Centralizados de Planificación de Recursos Empresariales, conocidos como ERP por sus siglas en inglés Enterprise Resource Planning, así como otros métodos.
Estos sistemas pueden implementarse en la totalidad del proceso logístico, o bien centrarse en algunas de sus etapas, como el transporte o la distribución y, en general, facilitan la toma de decisiones, la resolución de problemas, la planificación estratégica y la gestión de la cadena de suministro.
En función de su nivel de especialización, los SIL se pueden dividir en dos grandes tipos:
El principal beneficio de los sistemas de información logística es que permiten eliminar o reducir al mínimo posible errores en las distinta operativas, tanto los que tiene lugar fuera como dentro del almacén. De esta forma, prácticamente se eliminan de fallos, lo que redunda en una mayor eficiencia en la cadena de suministro y, en definitiva, en la optimización de todas las tareas. El resultado final es una mayor rentabilidad y productividad del trabajo de almacén.
Además, estas aplicaciones logísticas avanzadas juegan un papel fundamental a la hora de lograr otras muchas mejoras y ventajas, entre ellas:
Las tecnologías más avanzadas, como el Big Data o el Internet de las Cosas (IoT), funcionando de un modo integrado y paralelo, son las tecnologías que más pueden ayudar a perfeccionar los SIL. No obstante, convienen considerar que aún se encuentran en fase de desarrollo.
El IoT consiste en la instalación de sensores en los productos o equipos, lo que puede resultar de gran ayuda para controlar el stock, para realizar ajustes en la cadena de suministros o mejorar la atención y la personalización de los clientes. Sobre todo si los datos recogidos son, a continuación, analizados adecuadamente con programas de Big Data.
Otro ámbito de desarrollo de los sistemas logísticos es la aplicación de programas de inteligencia artificial, con el fin de mejorar las prestaciones de los vehículos guiados automáticamente (AGV) o la robotización de las plantas.
Otra de las tendencias de futuro es avanzar en el reparto autónomo fuera del almacén, mediante drones, robots para uso en logística (conocidos como cobots) y vehículos de reparto autónomos.
En Toyota Material Handling tenemos la solución ideal para cada problemas o situación relacionada con la logística. Analizamos y estudiamos cada caso junto a nuestros clientes y tomamos la decisión de centrar el foco en los aspectos que más le van a ayudar a optimizar y lograr los mejores resultados con su almacén: automatización, analítica, telemáticas, vehículos conectados, etc.