Value Stream Mapping (VSM) es una de las metodologías clave para establecer una imagen estructurada de los flujos de material e información en un proceso productivo. Le decimos ¿Por qué es importante conocer en detalle los flujos de material e información?
El Value Stream Mapping (VSM) es la herramienta que nos permite identificar la situación actual del sistema productivo. El conocimiento en detalle estos flujos de material e información posibilita la detección de desperdicio y cuellos de botella, y nos ayuda a detectar oportunidades de mejora en nuestra cadena de valor, para el diseño óptimo de una situación futura que, seguro, nos brindará mejores resultados.
Como herramienta de mapeo de procesos, durante un VSM nos pondremos en la piel del producto o servicio a entregar, lo que nos permitirá enfocarnos en el lead time del proceso, los tiempos de ciclo o el WIP en cada una de las etapas.
Esta metodología, por lo tanto, nos permitirá tener una visión macro desde la que percibir todas las necesidades y deficiencias TPS, por lo que es considerada, a menudo, como una de las primeras herramientas a utilizar para la puesta en marcha de una transformación Lean.
Los diagramas de flujo en el mundo productivo surgen a principios del siglo XX, mucho antes de Lean Manufacturing.
No obstante, Toyota fraguó una versión inicial de este método de cara a entender y mejorar los procesos en sus plantas, conocida como “Material and Information Flow Analysis".
A día de hoy, y con la occidentalización de los métodos utilizados por Toyota, esta herramienta es conocida como VSM o Value Stream Mapping, en parte, gracias a la investigación y publicaciones del investigador Mike Rother.
Algunas de los principales beneficios al llevar a cabo un Value Stream Map son:
En última instancia, VSM es una herramienta de mapeo de procesos enfocada en los flujos de material e información en procesos productivos. Existen otras muchas herramientas para mapear procesos. Por eso es importante entender cuando debemos utilizarla.
Otras herramientas o metodologías de mapeo de procesos son los llamados diagramas Spaghetti, los diagramas de Gantt, los flujogramas, los SIPOC o los diagramas conocidos como “Swim lane” o de carriles que, a diferencia de VSM, no son especialmente idóneos para el mapeo de procesos productivos.
Algunos intereses en los cuales VSM es la metodología idónea pueden ser la reducción de la variabilidad en el flujo de fabricación de un producto, la mejora del flujo de material e información en una línea ya existente, para determinar los lead times y tiempos de reposición en un proceso de fabricación o en el diseño de una nueva línea de fabricación.
También puede resultar una herramienta oportuna en proyectos de reducción de desperdicios y ajuste de costes, problemas de cumplimiento de entregas, mejoras de eficiencia…
Sin embargo, otras situaciones donde NO sería la herramienta más adecuada podrían ser:
Ante todo, es vital interiorizar que el verdadero valor de un VSM no es el mero hecho de tener nuestros procesos plasmados de forma visual, sino el proceso de mapeo y análisis en sí mismo, involucrando a los diferentes stakeholders, compartiendo el conocimiento acerca del mismo, debatiendo dónde se encuentran las oportunidades y cuál puede ser la situación futura.
Además, debemos remarcar la importancia del Genchi genbutsu en esta ocasión, pues sin ir al origen, entendiendo este como el propio proceso objeto del VSM , el resultado de la metodología seguramente arrojaría un resultado nada alineado a la realidad.