Tradicionalmente se ha justificado la utilización de carretillas con baterías de litio en operaciones de varios turnos y alta intensidad. No obstante, las ventajas de las baterías de litio son muchas incluso en operaciones con un solo turno. No requiere un segundo juego de batería, permite cargas de oportunidad y no es necesaria una sala de carga como en las baterías de plomo ácido. Si su operación es reducida o si en el almacén de su empresa realizan un único turno, a continuación repasamos las ventajas del Li-ion también en este tipo de operaciones.
Las operaciones de un solo turno suelen tener un espacio limitado en su almacén y, por lo tanto, buscan equipos de almacén más pequeños. Las carretillas de litio pueden permitirnos optar por un compartimento de batería más pequeño, lo que se traduce en un chasis compacto, que facilita las maniobras entre los pasillos más estrechos. Existen incluso modelos diseñados exclusivamente en torno a baterías de litio, como la transpaleta eléctrica BT Levio LWI160, con el objetivo de conseguir un diseño aún más reducido y compacto. En términos generales, la reducción del chasis de la máquina, requiere de la reducción del compartimento de la batería.
Además, las baterías de litio pueden cargarse en cualquier lugar y momento, lo que le permitirá utilizar ese espacio que tenía destinado a cargar las baterías de plomo ácido para otra cosa, como mayor capacidad de almacenamiento.
En operaciones de un sólo turno es frecuente que los operarios de las carretillas elevadoras realicen también múltiples tareas además de conducir la carretilla. Además, con baterías de plomo ácido es frecuente oír quejas de los operarios que van a utilizar la carretilla que no tiene batería, al no ser posibles las cargas de oportunidad. En este tipo de baterías, se requiere una formación específica y adecuada de manipulación y mantenimiento de baterías (rellenos de agua, manipulación segura de las baterías, ciclos de vida de las baterías, tiempos de carga y desconexión...). Esto requerirá de tiempo y atención, afectando a la productividad de la empresa.
En cambio, cargar las baterías de de litio es tan fácil como cargar un smartphone. Los operarios simplemente tendrán que poner a cargar la carretilla en los descansos. Dejan de ser necesarias las esperas y todo lo relacionado con la batería de la carretilla. Cuando el operario regresa de su descanso, la batería está cargada y lista para completar el turno. Por supuesto, la batería también se puede cargar durante el turno entre las actividades de la carretilla cuando esta esté parada, lo que se denomina "carga de oportunidad". Las baterías de iones de litio conllevan menos riesgos que sus homólogas de plomo-ácido. Con las baterías de litio, una carretilla puede permanecer conectada, ya que no existe la posibilidad de sobrecarga de la batería y se apagará automáticamente si se detecta cualquier error. Incluso si la batería se sobrecalienta o hace demasiado frío, se apagará sola. Esto hace que las baterías de litio sean más seguras. En definitiva, este tipo de baterías realmente no dejan lugar a errores y tienen un riesgo mínimo de dañarse o causar un accidente.
Mientras que el precio del plomo no deja de subir, el ion litio se ha abaratado mucho en los últimos diez años. Si tenemos en cuenta no tan solo el precio de adquisición sino el retorno de la inversión, podemos ver que el litio requiere un 20% menos de electricidad en comparación con las baterías de plomo ácido, lo cual es importante ya que los costes de la electricidad están lejos de disminuir. Además, las soluciones de litio son un 30% más eficientes energéticamente y las carretillas con esta solución energética mantienen la misma potencia un porcentaje bajo de batería que cuando están completamente cargadas. Esta es una gran diferencia con respecto a las carretillas con baterías de plomo ácido que pierden gradualmente su potencia a medida que disminuye el porcentaje de la batería.
Las baterías de litio no requieren revisión ni mantenimiento, tienen una vida útil más larga que las de plomo-ácido y cuentan con una garantía de 7 años, lo que significa que la batería ofrecerá el máximo rendimiento durante un máximo de siete años, en función de sus horas de conducción. Todas estas características innovadoras reducirán su coste total. La vida útil de la batería acompañará la vida útil de la máquina, ya que tienen ciclos de vida similares, por lo que no tiene que preocuparse de que algún día pueda necesitar una nueva batería para la carretilla.
Dado que no es necesaria realizar ningún tipo de instalación de coste elevado para las baterías de litio y gracias a su eficiencia energética, alcanzará el retorno de la inversión en dos o tres años tras su implantación. Cuanto más utilice sus carretillas, más rápido podrá rentabilizar la inversión.
Las baterías de litio también son una solución mucho más limpia, ya que:
Las baterías de litio también requieren menos energía para cargarse y tienen una vida útil más larga que el antiguo sistema de plomo-ácido. Además, gracias a las baterías de litio su almacén podrá tener un funcionamiento eficiente desde el punto de vista operativo y desde el punto de vista energético. También pueden reducir su huella de carbono si se utiliza electricidad verde en el proceso de carga.
Así pues, está claro que las ventajas de las soluciones de litio no se limitan a las grandes operaciones de varios turnos. El litio puede ser la solución también para las operaciones más pequeñas de un solo turno a ser más eficientes, seguras, rentables, neutras en cuanto a emisiones de carbono a la vez que ayudan a liberar algo de espacio extra en el almacén. Si cree que la energía de litio puede ser adecuada para usted, no dude en ponerse en contacto con nosotros, estaremos encantados de atenderle.